⎡Contra todo pronóstico (qué fácil es criticar en retrospectiva), el libro sustituyó al Codex a tiempo para la Ilustración, no porque las generaciones siguientes tuvieran la sensibilidad de un cubo de acelgas sino porque era más sostenible. El cálido pergamino que tanto amaba la aristocracia lectora estaba hecho con la piel estirada de un cordero o cabrito muy joven (la vitela de los más exquisitos está hecha con la dermis de nonatos o recién nacidos) y una biblia mediana le costaba el pellejo a muchos cientos. Y, como daba de comer a una industria entera de granjeros, peleteros, tinteros, escribientes, maquetadores e ilustradores, era tan caro que en el siglo XVIII los irredentos procedieron a “lavar” los exquisitos textos medievales para escribir lo suyo encima.
En aquellos palimpsestos desenterró el lingüista milanés Angelo Mai las cartas de Antonino y Marco Aurelio, algunas piezas de Homero y el Tratado de la República de Cicerón en 1822. Cabe preguntarse cuántas grandes obras del pensamiento occidental se fueron por el desagüe por desprecio a las nuevas tecnologías.⎦
En aquellos palimpsestos desenterró el lingüista milanés Angelo Mai las cartas de Antonino y Marco Aurelio, algunas piezas de Homero y el Tratado de la República de Cicerón en 1822. Cabe preguntarse cuántas grandes obras del pensamiento occidental se fueron por el desagüe por desprecio a las nuevas tecnologías.⎦
⎡El problema de Folk no es que sea un libro sencillo (de hecho abunda en barroquismos seudoposmodernillos y más o menos inermes en versos como “las zarzas tensan vías”, “Dios, /pulmón de vaca”, “aquí el perro / quiere ser tu ciervo”, etc. etc), sino que es más bien, y por lo que he explicado, un libro simplón. Todo parece indicar que Fruela Fernández tiene el talento suficiente para permitirse ser más ambicioso, pero le ha podido la desgana. No hay un solo poema que parezca dictado por la necesidad. No es un libro del todo desdeñable: el tema, ya se ve, hubiera dado para más y Fernández nos deja algunas muestras de verdadero talento verbal (ese “aprendizaje por esquejes”, por ejemplo) pero aparecen abandonadas en una maraña de naderías, de cosas puestas ahí «porque suenan bien». Yo al menos, si de algo no tengo ganas es de la desgana. Cree uno que la poesía es otra cosa, pero eso también es algo que he pensado leyendo este libro: «este señor no se dedica a lo mismo que yo». Así que tal vez sea eso, que uno no sea muy de la poesía folk. En este caso, ni fu ni folk.⎦
*Fruela Fernández, 2011.
*El libro no se muere sino todo lo contrario. Darío Turing para eldiario.es, 19.02.13. [artículo completo aquí]
*El libro no se muere sino todo lo contrario. Darío Turing para eldiario.es, 19.02.13. [artículo completo aquí]
*La desgana de Fruela Fernández. Martín López-Vega para Rima interna, elcultural.es, 25.02.13 [reseña completa aquí]
*The Times They Are A-Changin´. The Beach Boys, 1965.
*The Times They Are A-Changin´. The Beach Boys, 1965.