28.4.14

En fiera expectación de galgos

[Death's still the secret of life,
                the garden reminds us.
Or vice-versa. It's complicated.
Unlike the weed-surge and blossom-surge of early fall,
Unlike the insect husks in the spider's tracery,
Crickets and rogue crows gearing up for afternoon
    sing-along.
The cottontail hides
        out in the open, hunched under the apple tree
Between the guillotine of sunlight and guillotine of shade
Beyond my neighbor's hedge.
                 The blades rise and the blades fall,
But rabbit sits tight. Smart bun.
Sit tight and hold on. Sit tight. Hold on.]


[La muerte sigue siendo el secreto de la vida,
                          el jardín nos lo recuerda.
O viceversa. Es complejo.
Distinto al surgir de la hierba y al volver del otoño
    temprano,
distinto a los hollejos de los insectos en la telaraña,
cuervos y grillos vagabundos ensayan el canto vespertino.
La liebre-cola-blanca se esconde
        en lo abierto, se agazapa bajo el manzano
entre el filo de la luz y el filo de la sombra
más allá del arriate del vecino.
                Los brotes crecen y caen
pero el conejo permanece quieto. Astuto conejo.
Mantente tranquilo, sostente. Mantente tranquilo. Sostente.]




*Caribou. Charles Wright, 2014.
*Black Zodiac [Trad. Jeannette L. Clariond]. Charles Wright, 1997.
*First There Was. Johnny Down, Maggie Brown, 2003.

16.4.14

Meras asociaciones









*Structural Filmwaste. Dissolution 1. The Films of Siegfried A. Fruhauf. Siegfried A. Fruhauf, 2003.
*Meet Me On The Corner. Lindisfarne, 1971.

11.4.14

El poeta ponga su fábula en limpio

[Tenía que ser una vocal o una consonante, puesto que sólo estos dos grupos tienen fonación (vibración de las cuerdas vocales) sin neumación (emisión de aire) frente a las consonantes que carecen de fonación (las sordas) o la tienen, pero con neumación (las sonoras). El elegir la fonación responde al hecho de que ella sea la actividad motriz más peculiar de la palabra; la neumación concurre también en cosas tan importantes como respirar, toser, estornudar, soplar, etcétera. Tan sólo las funciones expresivas-gritar, quejarse, etcétera, parientes del hablar –comparten la fonación con la palabra. Pero ¿por qué no las consonantes sonoras, aunque tengan neumación, ni las vocales? De las primeras, no las oclusivas, porque no comportan –ni por lo tanto pueden expresar- una actividad continua, durativa, como parece que ha de ser “pensar”, sino una acción instantánea. Quedan, por fin, las consonantes sonoras fricativas, que junto con las vocales y hasta con tres de las consonantes (l, n, r) reúnen las condiciones de tener fonación y poder ser continuas. La dificultad que queda ya no es fonética sino facial: todas ellas se emiten con la boca abierta. Y quien abre la boca ya le ha franqueado la puerta a la palabra. Pensar es justamente la actividad que “se prepara y se dispone a abrirla y franquearla. Sólo el fonema eme reúne los caracteres adecuados para representar el pensamiento: actividad motriz del órgano más específico de la palabra (vibración de las cuerdas vocales), durativa (fonema continuo) y conativa (con la boca cerrada). Ningún otro fonema –al menos indoeuropeo- comparte tales rasgos con la eme.]

*Dial M For Murder. Alfred  Hitchcock, 1954.
*Vendrán más años malos y nos harán más ciegos. Rafael Sánchez Ferlosio,1993.

9.4.14

Demos a la fatiga una tregua y hablemos




Después de días, muchos, muchos días
-cada uno con su cara
y su rudo instrumento de dominio en la mano-
me comparo a la bestia que ya ha tascado el freno,
que ya ha sentido hundirse la espuela en el ijar
y sabe cómo el brío y el furor
ascienden, se deshacen
entre los belfos como espuma inútil.

Sí, callo. Sí, me inclino. Me detengo,
me apresuro según la rienda manda.
Para que mi jinete, mi destino
-ese a quien no conozco-, vaya hasta donde va.

Cuando joven pací en una pradera
abundante de nombres y yo escogí lo mío.
Pero mi senda de hoy tiene nomás un trébol.
Con un pétalo dice mansedumbre
y con otro lealtad
y con otro obediencia.

Ay, pero el cuarto, el último,
la hoja de la suerte verdadera,
dice sólo abyección.

Amigo que encegueces cuando miras, ciégame,
úngeme de soberbia,
amortigua mi tacto, mi memoria,
todo lo que ilumina, lo que lee,
para que quede oculta esa palabra.

*Balún Canán. Rosario Castellanos, 1957.
*Emblema de la virtuosa. Rosario Castellanos, 1969.