4.3.10

Sobre otro día


P. ¿La escala cambia a los arquitectos?

R. Y la edad. Cuando era más joven estaba preocupado por el estilo, por la elegancia. Y hoy valoro más la naturalidad. Para poder resistir, para que los edificios permanezcan, es importante que las cosas se vivan como naturales. Un poco como ocurre con los animales, que cuando nadan mucho pierden las manos que se transforman en aletas. La naturaleza responde siempre de la manera más natural, con lógica. Y creo que antes yo hacía una arquitectura muy preocupada por ser coherente y que, sin embargo, respondía a un campo muy limitado de la realidad. Hoy he ido perdiendo el miedo a hacer cosas feas. No es que nadie quiera hacer algo feo de entrada. Es que para hacer cosas bonitas hay que perder el miedo a hacerlas feas.

*Bocetos para el Estadio Municipal de Braga, Portugal. Eduardo Souto de Moura, 2004.

*Entrevista a Eduardo Souto de Moura. Anatxu Zabalbeascoa. El País. 30/06/2007.

1 comentario:

  1. Pensaba que el estadio era un barco antiguo.

    Ningún barco puede ser feo porque su idea original es esencialmente bella.

    Lo mismo se puede decir de cualquier boceto.

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